La adicción a las redes sociales se clasifica como una adicción conductual en la que uno se involucra en un uso obsesivo o incontrolado de las plataformas de redes sociales en la medida en que interrumpe e impacta negativamente el funcionamiento normal. Dado que la adolescencia está marcada por un período significativo de crecimiento del cerebro, los adolescentes son particularmente susceptibles a engancharse a las redes sociales durante este tiempo.
El tiempo excesivo frente a la pantalla es el signo más evidente y notable al evaluar la adicción a las redes sociales. Sin embargo, es importante señalar que incluso en las escuelas utilizan dispositivos, lo que requiere que los adolescentes pasen aún más tiempo con sus teléfonos u ordenadores. Esto puede dificultar el seguimiento de la adicción, ya que el tiempo frente a la pantalla por sí solo no siempre es indicativo de cuánto tiempo pasan en las plataformas de redes.
Algunas señales a las que debemos prestar atención si estamos preocupados por nuestro hijo adolescente si pensamos que tiene un problema de adicción a las redes sociales:
1. Incapacidad para desconectarse
Los adolescentes que muestran problemas para realizar actividades fuera de línea, como conversaciones cara a cara con otras personas en la vida real, y que parecen no poder alejarse de las redes sociales, pueden estar sufriendo adicción a éstas.
2. Secretismo y actitud defensiva
Los adolescentes que mantienen sus redes sociales ocultas o privadas o que se muestran a la defensiva o protegen demasiado sus interacciones en las redes sociales podrían estar luchando contra la adicción a las redes sociales.
3. Descuidar las responsabilidades
Faltar a la escuela u otras actividades, no terminar sus tareas o ignorar los quehaceres del hogar para pasar tiempo en las redes sociales es una señal clara de que los adolescentes tienen problemas para priorizar las tareas, posiblemente debido a su adicción.
4. Retraimiento y aislamiento social
Rechazar eventos sociales o pasar tiempo con la familia para aislarse y tener más tiempo para dedicar a las redes sociales es un signo problemático de adicción.
5. Fatiga y alteraciones del sueño
Los adolescentes que se vuelven adictos a las redes sociales experimentan interrupciones en el sueño debido a que pasan tiempo en las redes sociales antes de acostarse, cuando se despiertan en medio de la noche o cuando se despiertan a primera hora de la mañana.
6. Irritabilidad o cambios de humor
Si un adolescente se vuelve notablemente irritable, enojado o ansioso cuando no puede conectarse a las redes sociales, ya estaríamos hablando de síntomas de abstinencia.
7. Problemas en las relaciones interpersonales.
La adicción a las redes sociales puede comenzar a afectar negativamente las relaciones de los adolescentes porque eligen participar en las redes sociales en lugar de hacerlo con amigos o familiares.
8. Miedo a perderse algo (FOMO)
El miedo a perderse algo (FOMO) describe la sensación de que otras personas se divierten o experimentan cosas nuevas sin ti. Los adolescentes pueden estar ansiosos o preocupados de que, si no están constantemente en línea, se perderán eventos o actualizaciones importantes.
9. Baja autoestima o necesidad constante de validación
El deseo de validación social influye en las respuestas emocionales, donde la validación positiva conduce a una mayor autoestima y la validación negativa puede causar sentimientos de insuficiencia o insatisfacción. En pocas palabras, los adolescentes pueden verse afectados por lo que ven en las redes sociales y compararse con ese estándar. Si sienten que no cumplen con el mismo estándar, podrían sufrir de baja autoestima.
10. Síntomas físicos
Los adolescentes adictos a las redes sociales pueden experimentar problemas físicos por pasar demasiado tiempo frente a las pantallas. Los problemas pueden incluir dolores de cabeza, fatiga visual, dolor de espalda o cuello o síndrome del túnel carpiano